El otro día, mirando mi closet, y haciendo ya mi fondo de armario, se me ocurrió algo que a todos en más de una ocasión nos ha ocurrido y hemos dicho: ¡No tengo nada que ponerme! Y es que a veces por mucho que tengamos en perfecto orden nuestros básicos para combinar outfits, tenemos aquellas prendas que nos gustan pero que nos cuesta encontrar la ocasión para usarlas y terminan allí, al fondo del armario casi como un objeto fetiche, sin uso alguno.
Ya hemos hablado sobre que prendas nos favorecen según nuestro tipo de cuerpo y cómo debemos organizar nuestro armario, pero no muchos saben sobre qué colores más nos favorecen y precisamente de eso quiero hablarles hoy, sobre la ergonometria del color.
Pero ¿qué es la ergonometria del color?
Ergonometria es la armonía que se logra entre estructura y sensación, es un estudio científico que se usa en el diseño en general, ya sea en un objeto, un lugar de trabajo, incluso al cuerpo humano y refiere directamente a la comodidad al usar algo.
Y llevado al color, es la armonía que logramos con nuestro outfits a través de la forma de la prenda, nuestro tipo de cuerpo y los colores que nos favorecen, haciendo que el conjunto sea un must para nuestra figura.
Analicemos entonces los colores por cálidos y fríos, sin contar el blanco y el negro, ya que estos son ausencia y presencia de color respectivamente.
Cálidos: El rojo, rosa, fucsia, violeta, amarillo, naranjo, verde pistacho, amarillo limón, todos crean volumen a nuestro cuerpo, por ende debemos ocuparlos en las partes de nuestro cuerpo que queremos aumentar, por ejemplo si eres cuerpo de triángulo, usa estos colores en la parte superior, por el contrario si eres cuerpo de triángulo invertido, prefiere estos colores. Por otro lado si quieres acentuar tu cintura, sin dejar de ocupar un color cálido, te recomiendo usar por ejemplo una chaqueta con pinzas a la cintura color negro o un tono neutro como el caqui o gris, también una opción es usar un cinto o cinturón a la cintura en color negro, ya que así le darás forma a tu cuerpo. Puedes acompañarlo con un maquillaje natural y labios nude para que tu piel no tienda a verse rosada.
Fríos: El azul, celeste, café, camel, verde oliva, viridian, y sus tonalidades, quitan volumen, por ello te recomiendo los ocupes donde quieras restar volumen ya sea en hombros, caderas o cintura. Por otro lado a muchas mujeres les pasa que al no estar conformes con su figura, tienden a crear un atuendo completo en tonos fríos, esto sólo hará que te veas apagada y afectará la luz de piel, para ello crea un outfits con al menos una prenda en tono cálido o accesorios que contrasten y le de luz a tu piel, acompañado de un maquillaje más cálido, especialmente en los pómulos.
Blanco y Negro: Como había mencionado, estas tonalidades no son colores, sino ausencia y presencia de color. Como ya debes saber, el blanco otorga volumen pero también aporta luz natural. Para ello te recomiendo lo ocupes en las partes donde quieres hacer que tu cuerpo se vea más exuberante. El negro entrega elegancia, es un clásico y afina la figura, la acentúa. Para ello te recomiendo que lo uses en las partes de tu cuerpo que quieres disimular.
Sigue estos consejos, recuerda que siempre debes conocer tu cuerpo, quererlo y respetarlo.
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